Terror nocturno

Por Viridiana Nárud

Has provocado una necesidad de autoconfesión que no quisiera. Despertar en medio de la noche con palpitaciones en el pecho, pensando en ti, me resulta una molestia. ¿Cómo se obliga a un sentimiento  abandonar el cuerpo?

Sufro de nauseas de ti, de miedo de ti y, sin querer, todos los fantasmas de mi pasado cobraron vida. ¿Sabes qué es lo molesto de los fantasmas? Que a pesar de ser inútiles, incapaces de hacer daño físico, su sola presencia aterra.

Quisiera ser capaz de dejar todo atrás. Pero nunca he sido buena diferenciando el pasado del presente. El tiempo siempre me parece el mismo. Quisiera vomitarte y en ese vomito expulsar todo deseo de ti, nulificare de la existencia.