Palabras a medias

Por Viridiana Nárud

El lenguaje se encuentra cooptado por políticos, los “buenos modales” y la “discreción” que la sociedad demanda. La expresión de los sentimientos y el deseo causa escándalo pero no las revistas de chismes. La expresión de los sentimientos está prohibida.  Mantener el lenguaje y los pensamientos al margen de la salud mental es un deber. Sólo se debe decir lo correcto.

La libertad no responde a naturaleza del hombre. Es un acto de sublevación. De no ser así, muchos de los libertadores de las Naciones, de la Naturaleza, del Arte estarían vivos. El impulso de someter o ser sometido es algo que se dibuja en nuestras sociedades y pareciera que responde al orden natural de la existencia.

¿Por qué tememos a las palabras? ¿Qué estamos callando? ¿Por qué si la poesía está perdiendo su capacidad de crear metáforas está perdiendo su efectividad? ¿Por qué nos evadimos de la realidad? ¿Por qué hemos dejado de cuestionar la realidad y tratar de crearla en el arte? La abstracción ha perdido sentido y vivimos rodeados de gobernantes frívolos y cómo podrían crear otra realidad si han perdido la capacidad de sentir empatía. Me pregunto también ¿cómo el arte puede transformar nuestra realidad si ha tomado el lenguaje de los políticos y las estadísticas? Es necesario retomar nuestro idioma y animarlo.